Hola a todos. He creado este blog, con la intención de que exista un lugar en la red, abierto para compartir experiencias, proyectos e ideas. Me considero una persona jovial, amante de nuestro planeta, viajero, soñador y apasionado de nuestro entorno. Me gusta viajar, realizar deportes en contacto con nuestro medio natural, para disfrutar con familia y amigos de largas jornadas de entretenimiento. Todo para aprender. Quiero con esto invitar a que se acomoden en el diván de la tertulia, y comunicar aquello que os entusiasme y os ayude a soñar. A partir de aquí, tenemos mucho que hablar.

“La Tierra y el cielo, bosques y campos, lagos y ríos, las montañas y el
mar son excelentes escuelas que nos enseñan muchísimas cosas que no se pueden
aprender en los libros”.

John Lubbock


viernes, 29 de septiembre de 2017

Travesía en Kayak Costa Tropical 
II Etapa. Castell de Ferro – Torrenueva

 8 de Marzo de 2017



Seguimos con nuestro proyecto de navegar en travesía con nuestros Kayak por el espectacular litoral que comprende la Costa Tropical de Granada. Tras abandonar el poniente de esta costa y dejar tras nuestros kayaks un territorio consolidado en el cultivo de productos de invernadero, pasamos a seguir navegando bajo los imponentes acantilados cargados de historia, donde unos excelentes miradores nos mostraran paisajes de una espectacular belleza. Aquí se funde la historia con el patrimonio monumental que han quedado como muestra de nuestro legado cultural. Las inaccesibles calas son las referencias que indican la preservación de los fondos marinos existentes. Las rocas de los acantilados sumergidos crean un ecosistema con un alto valor biológico y paisajístico que serán, en un futuro el motor turístico que aportarán recursos a las poblaciones que en este territorio existen.

Powered by Wikiloc
 Para descargar esta ruta: https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=15381826

Acividad/Exploración Kayak






Distancia recorrida: 15 kilómetros aprox.
Grado de dificultad: Moderado
Tiempo: 3 horas 33 minutos
Fecha: 8 de narzo de 2017
Finaliza en el punto de partida: No Lineal. Hay que hacer juego de vehículos.
Coordenadas: 444
Recomendaciones: Llevar equipo de seguridad, Chaleco, remo de repuesto etc. Comida y agua. Usar protección solar



  Vídeo editado por El Rincón del Viajero: https://www.youtube.com/watch?v=6LgH7725gqk



Para iniciar la travesía lo hacemos desde la localidad de Castell de Ferro. Después de dejar un primer vehículo en Torrenueva, hacemos el juego de coches dejando otros vehículos en la Playa de Castell – Cambriles.


Embarcamos y tomamos rumbo hacia poniente, dirigiendo nuestros Kayak a la punta más prominente y cercana del lugar.


Se trata de la Punta Tajo de Justos, nuestro primer acantilado de los muchos que quedan por ver. Este territorio pertenece al municipio de Los Gualchos y es un lugar ideal para pescar muy visitado por los pescadores del lugar.


Tras pasar la Punta de los Melonares encontramos pequeñas calas que solo son accesibles por mar. Estas pequeñas calas son de poca longitud y muy pedregosas. Pueden ser un excelente sitio para desembarcar y practicar el buceo en snorkel.


Seguimos nuestra navegación por un bello entorno compuesto por los acantilados que perfilan las laderas de las estribaciones montañosas. Así alcanzamos el puntal del Grajo una lengua rocosa que se adentra en el mar formando una pequeña ensenada. Seguidamente otra pared del acantilado da paso a otra pequeña ensenada donde se encuentra una cueva en parte sumergida conocida como la Cueva del Agua.


Al poco divisamos otro largo cabo que rompe con la fisionomía del paisaje que siempre estamos observando. Se tratan de los Acantilados de la Rijana o como lo llaman los nativos “El Pico del Águila”, cuyo Peñón divide las calas de la Rijana y la Rijanilla. En en este entorno donde es fácil encontrar diversas especies de cabra montés que bajan de las sierras colindantes para buscar el pasto que afloran entre las rocas. Además cuenta con un enorme valor botánico, ya que de forma natural crecen espontáneamente la pita, el esparto el palmito y varias especies de palmitos. También se pueden encontrar plantas medicinales como la zahareña, ideal para para curar heridas.


En la parte más visible y prominente de este acantilado encontramos los restos de la que antaño fue La Torre de Los Condenados o la Torre de la Rijana de 3,5 metros de altura, y que en la actualidad se encuentra semiderruida. Esta torre es un vasto ejemplo del alto valor estratégico de estas construcciones que fueron utilizadas por diversas culturas para la defensa y vigilancia de la costa mediterránea. Actualmente es muy atrayente para los turistas y las gentes del lugar gracias a la fama que le proporcionó el rodaje de la película “Al sur de Granada”.


Doblamos el peñón entre dos enormes rocas que dan entrada a la Cala de la Rijana, una pequeña y bonita cala de 250 metros de longitud totalmente natural y sin apenas servicios que solo tiene acceso por tierra por un camino de tierra que desciende de la carretera nacional 340. Tras pasar a través de un túnel se abre unas increíbles vistas al mar, donde los fondos marinos que aquí se encuentran son visitados durante todo el año por diversos buceadores que buscan unos fantásticos paisajes llenos de vida y color.


Seguimos nuestra travesía alcanzando una pequeña ensenada que forma una bonita piscina natural que es aprovechada por una pequeña concentración de casas emplazadas en La Punta de La Rijana. Otro recodo en este cabo alberga una pequeña playita donde se puede desembarcar.

 Los Acantilados Orientales, un mirador a la historia y al mar 

 Así podríamos calificar a estos imponentes acantilados situados en la costa oriental granadina, donde las rocas y las laderas de las últimas estribaciones de las sierras de la Contraviesa y Lujar perfilan el litoral siendo un excelente mirador al mar de Alborán.
En estos acantilados por su morfología geológica de escarpes y roca, además de su estratégica situación, desde tiempos remotos fueron el lugar elegido por distintas cultural para construir asentamientos de control y vigilancia de posibles asedios. Las zonas costeras siempre han sido de especial interés por sus características y grandes recursos que la hacen vulnerable propiciando la necesidad de defenderla.

Parece ser que desde el Neolítico y la edad de bronce, la presencia de algunos grupos humanos ocuparon estos emplazamientos, como lo demuestran los restos encontrados en la Cueva de las Campanas, situada en la Cala de la Rijana, la Sima de los Intentos en Gualchos – Castell de Ferro o el Cortijo del Carpintero en Lujar.

En cuanto a la ocupación romana en este territorio, al ser más montañoso y abrupto, es menos abundante que la costa occidental. Aun así también se han localizado vestigios romanos que al parecer ya defendían el lugar. Es en este mismo lugar donde los cristianos construyeron la torre de la Rijana o de los Condenados tras reutilizar los asentamientos de la época musulmána.
La Torre se encuentra sobre un peñón donde fue utilizado en época califal, para construir una fortificación entre las rocas que defendería las calas colindantes. Más tarde, durante el dominio nazarí, aprovecharon este lugar albergando una dotación de soldados. Finalmente en época cristiana entre los siglos XVI y XVII construyeron un aljibe y la torre cuyos restos se aprecian hoy.
Hacia poniente, la Carretera Nacional 340 forma una gran repisa que transita de oeste a este todo el litoral hasta llegar a Calahonda, una localidad situada en una pequeña bahía flanqueada por los acantilados y la franja de arena que se extiende hasta la Punta de Carchuna o del Llano. En sus alrededores descubrieron un alfar romano dedicado a la fabricación de ánforas que demuestran el interés de las culturas por estas tierras. Como en otros lugares estratégicos, la Torre del Zambullón, de 9 metros de altura se levanta sobre la Punta de Cerro Gordo, un promontorio a 50 metros de altitud que protege la ensenada de Calahonda de los vientos de levante. La labor de esta atalaya es la misma que todas las construidas en el siglo XVI al aumentar la piratería. Así protegería la desembocadura del Puerto de Calahonda vigilando la Cala de la Rijana y comunicando también la Torre del Llano de Carchuna a poniente, con el fuerte de Castell a levante.

Antes de llegar a los Acantilados de Torrenueva el Fuerte de Carchuna situado en la Punta de las Caldera, defiende con sus baterías una gran extensión de playa que divide los dos acantilados. Sirve de divisoria entre las localidades de Calahonda y los acantilados de Torrenueva donde se encuentra El Cabo Sacratif, un macizo rocoso y el punto más alto de los Acantilados de Torrenueva, donde también se sitúa un faro construido en 1863 sobre los cimientos de una torre vigía ya desaparecida. En los alrededores de Torrenueva el Yacimiento Romano de Maraute aporta pruebas del interés de los asentamientos humanos por estos territorios, donde la industria pesquera, la vega del Guadalfeo y los imponentes acantilados, unos excelentes miradores al mar, hacían un lugar privilegiado y deseado por diversas culturas para poder vivir.

 “Lo que cae hacia la costa de la mar está muy despoblado 
y por eso es muy peligroso, porque acuden de ordinario por 
allí muchos bajeles de los corsarios turcos y moros de Berbería”. 

Luis de Mármol. Siglo XVI.


El emplazamiento de este pequeño núcleo de población se encuentra en la parte superior del promontorio teniendo unas vistas espectaculares del litoral.


Ponemos rumbo de nuevo hacia poniente. Esta vez hacia la Punta del Cerrón, otro gran peñón que protege de nuevo otra ensenada que alberga dos pequeñas e inaccesibles calas.


A lo largo de esta travesía encontramos diversas cuevas o entrantes en la roca en las que nos podemos acercar. Algunas de sus entradas permanecen sumergidas en el mar formando un perfecto hábitat para muchas especies de peces. En algunos puntos de estos acantilados se han localizado zonas muy frecuentada por los buceadores explorando los espectaculares fondos que aquí se encuentran.


El próximo punto de referencia en el que ponemos rumbo es a la Punta de Cerro Gordo un acantilado bastante vertical donde se encuentra emplazada la Torre del Zambullón una atalaya troncocónica construida en el siglo XVI.


Tenía como misión proteger el puerto de Calahonda y vigilar las playas colindantes. A finales del siglo XVIII se le adosó una batería baja mirando al mar para apoyar el fuego cruzado de las defensas de Castell y Carchuna. Estaba dotada de tres soldados torreros que en otras ocasiones se reforzaban con tres soldados de infantería y un soldado de artillería. En varias ocasiones fue reparada y utilizada por carabineros desde 1839 a causa de su posición estratégica.


Dejamos a nuestras espaldas el impresionante cabo para entrar en el puerto de Calahonda situado en el extremo más oriental de su municipio. Esta playa tiene una longitud de 1200 metros de largo y 40 de ancho, donde alberga un pequeño núcleo de población que se incrementa en época vacacional.


La localidad de Calahonda fue construida en torno a su puerto en el siglo XIX, junto a la Iglesia de la Purísima que a finales de 1872 se construyó para dar servicio a los habitantes de este pueblo. Así se evitaba que la gente se trasladara a los Gualchos para oír misa. Cerca del cementerio se encuentra la Cueva Bigotes, un escondrijo de un personaje conocido como “el Bigotes” que servía para esconderse de las tropas francesas tras cometer sus sabotajes.


Continuamos nuestra travesía alcanzando el núcleo de población La Perla de Andalucía, emplazada en el Puntal de Carchuna o del Llano, una extensa lengua de tierra que se adentra en el mar, que junto a los acantilados forman la bahía de Calahonda.


Aquí se encuentra la torre de Carchuna o para algunos el Farillo de Calahona. Se trata de parte de un torreón inclinado y semienterrado de origen árabe que consecuencia de los temporales en varias ocasiones se han inclinado. Fue reconstruido en la segunda mitad del siglo XVI junto a dos torres más para la defensa de la piratería. Posteriormente fue dotada de dos cañones y varios soldaos torreros. A mediados del siglo XIX se utilizó como faro para orientar a las embarcaciones que se acercan a su costa, pero a causa de los temporales al final ha quedado como se ve en la actualidad.


Salimos al mar donde apreciamos un paisaje más abierto. Pronto alcanzamos una plataforma rocosa sumergida a poca profundidad en la Punta de las Calderas que nos indica que es un excelente lugar para la práctica del snorkel. Frente a nosotros se presenta un edificio fortificado, de planta cuadrada que nos indica que es otra pieza más de las defensas del lugar.


Se trata del castillo de Carchuna, construido a finales del siglo XVIII, concretamente en 1777 por mandato de Carlos III para evitar los ataques de piratas y que fue decisivo para el arraigo de los habitantes de Carchuna y Calahonda. Esta fortificación poseía cuatro cañones y una dotación de un oficial y 18 soldados de infantería, 1 cabo y 8 hombres de caballería que tenían asignado patrullar las playas; un cabo y 4 artilleros, un guarda almacén y un capellan. En las guerras acontecidas con los franceses primero y los ingleses después, lo dejaron maltrecho para entrar en un periodo de abandono total. Durante la Guerra Civil española el castillo fue escenario de un hecho histórico de gran relevancia, ya que el 23 de Mayo de 1938 se llevó a cabo un rescate de presos republicanos, en su mayoría asturianos que allí se encontraba. En la actualidad el Castillo está rehabilitado gracias a las subvenciones aportadas.


Al poco llegamos a la Punta del Cuartalejo, donde se sitúa el Camping D. Cactus, un lugar ideal para desembarcar y estirar un poco las piernas. Aquí también aprovechamos para refrescarnos y comer algo.


Tras el descanso ponemos rumbo al imponente cabo de 100 metros de altura que vemos ante nosotros. Se trata del Cabo Sacratif, un largo acantilado que alberga puntas, ensenadas, calas paradisiacas y algunas ensenadas donde albergan extraordinarios puntos de inmersión como la Ensenada del Zacatín, un bello ecosistema marino que alberga unos paisajes de ensueño. No solo es de especial interés sus fondos marinos. También en la superficie cobra importancia las plantas de matorral con tendencia árida influidas por los vientos marinos y otras más corrientes como el palmito, el romero, tomillos y cantuesos.


Sobre este cabo, concreta mente en el Cerro del Chucho, se encuentra emplazado el Faro de Sacratif, de forma troncocónica de 17 metros de altura. Fue iluminado por primera vez el 31 de diciembre de 1863 con un alcance lumínico de 25 millas náuticas. Se encuentra adosado a un edificio de una planta que alberga la vivienda del farero. En el inicio de su funcionamiento la linterna de este faro estaba dotada de una lámpara de aceite de oliva, que fue cambiada en 1916 por otra alimentada con vapor de petróleo. Finalmente en 1956 se colocó una nueva lámpara alimentada con electricidad que se mantiene en la actualidad.


Tras doblar el cabo alcanzamos la Playa de la Joya. Como indica su nombre es una de las pequeñas playas más bonitas del lugar solo accesible en embarcación, a nado o bajando por una sinuosa vereda que desciende desde lo alto del acantilado. Para llegar a ella hay que tomar un camino de tierra que parte desde los alrededores de la Punta de Jólucar y que transcurre por el acantilado hasta llegar al Faro de Sacratif.


Justo al pasar la Playa de la Joya, alcanzamos otro cabo rocoso que se adentra en el mar y que es frecuentado por los pescadores de la zona. Se trata de La Punta de Jólucar, último punto de referencia antes de llegar a nuestro destino.


Al fin alcanzamos Torrenueva. Desembarcamos frente a un palmeral que hay junto al Peñón de Jólucar. Lugar donde dejamos otros vehículos y el final de etapa elegido en esta travesía. 

 Como llegar 

Para llegar a Castell de Ferro desde Granada o Almería por la A-7, autovía del Meditérraneo, salidas a Motril – o Castell de Ferro. Después tomar la Carretera Nacional 340, una u otra dirección llevará a distintas localidades. Alojamiento y Comida En esta franja costera podemos encontrar múltiples alojamientos y restaurantes que daban servicio a la antigua Carretera N- 340. Así mismo en Castell de Ferro, Calahonda, Carchuna y Torrenueva se pueden encontrar todo tipo de servicios turísticos que paliaran todas las necesidades.

En Castell de Ferro podéis alojaros y comer en la Pensión Costasol. Esta sencilla y cómoda pensión está situada en el paseo marítimo a 50 metros de la Playa de Castell de Ferro – Cambriles.


Dispone de habitaciones climatizadas con baño y vistas al mar, bar, terraza de verano, comida regional casera e internacional.

 Restaurante Costasol 
Carretera de Almería 1 18740
 Castell de Ferro (Granada)
Teléfono: 958656054
 www.hostalcostasol.com 

En Carchuna se encuentra el Hotel – Restaurante El Ancla.   Está situado a escasos 30 metros de la Playa de Calahonda. Dispone de 26 habitaciones dobles, con vistas al mar totalmente equipadas con baño, tv, calefacción, aire acondicionado y wi-fi. Además del restaurante y el bar, dispone de una amplia terraza comedor, barbacoa, salón de conferencias etc…


Este restaurante es uno de los más demandados del lugar. Se puede elegir entre decenas de platos de cocina mediterránea y tradicional. Su especialidad es el pescado y la carne a la brasa, aunque también dispone de pizzería y comida para llevar al instante.

 Hotel  – Restaurante el Ancla
 Avd de los Geráneos 1 18730
Calahonda (Granada)
Teléfono: 958623042
www.anclamar.es 

 Para Alojarse en Carchuna El Camping don Cactus puede ser una buena opción. Fue inaugurado en 1977. A lo largo  de su existencia, se han ido realizando ampliaciones y reformas que lo han convertido en unas instalaciones de calidad. Ofrece una magnífica situación a pie de la Playa de Carchuna. A través de la carretera N 340 se encuentran los carteles indicativos que lo llevan a él. Es un Camping de 1ª categoría que ofrece además de espacios para caravanas y bungalows, talleres de animación y tiempo libre y una excelente piscina.


Su Bar restaurante ofrece muy buenas tapas y una amplia gama de platos de comida mediterránea. También a diario ofrecen menús.

Camping D. Cactus 
Playa de Carchuna S/nº 18730
Carchuna (Granada)
Teléfono: 958623109
 http://www.doncactus.com

 En Torrenueva podéis comer en el Restaurante Casa Cristobal.


Está localizado junto al peñón de Jólucar lo que hace que sea ideal para comer en el después de desembarcar. Ofrece raciones y buenas tapas aunque su especialidad es el pescado fresco.

Restaurante Casa Cristobal
Paseo Marítimo. Peñon de Jólucar
Torrenueva (Granada).
Teléfono: 958835636

 Más información: granembolao@gmail.com

miércoles, 20 de septiembre de 2017

Gran Senda de Málaga 2ª Etapa 

Rincón de la Victoria – Vélez Málaga 

5 de marzo de 2017



La ruta que vamos a realizar está enmarcada en el litoral oriental de Málaga siguiendo la tónica que llevamos desde que salimos por primera vez en el Puerto de Málaga. De esta forma encontraremos una sucesión de zonas pobladas con amplias playas donde la vida urbana se funde con los usos propios marineros. Desde el Rincón de la Victoria, (una inmensa extensión urbana), hasta la fértil vega de Vélez Málaga, la ruta irá paralela a la carretera Nacional 340 reflejando una diversidad paisajística que se funde con el azul del mar. Estas circunstancias, junto al marcado carácter de los pueblos malagueños hacen de esta ruta ser un fiel reflejo de lo que el visitante puede encontrar en esta parte de la provincia. También nos acercará a la puerta de la Axarquía, una fértil y rica comarca en plena expansión, donde el visitante se sorprenderá por sus bellos paisajes. Esta ruta amena y fácil hará que vivamos una experiencia única y difícil de olvidar.

 
Powered by Wikiloc

Para descargar esta ruta: https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=16669896 

Actividad/ Senderismo
 





Distancia recorrida: 22,7 kilómetros
 Altitud min:12 metros, max: 48 metros
Desnivel acum. Subiendo: 359 metros, bajando: 315 metros
Grado de dificultad: Fácil
Tiempo: 6 horas 36 minutos, (con paradas incluidas)
Fecha: 5 de marzo de 2017
Finaliza en el punto de partida: No. (Hay que hacer el juego de coches).
Coordenadas: 1267
Recomendaciones: En verano no hacer esta ruta en horas de máxima insolación.

   

 Vídeo editado por el Rincón del Viajero: https://www.youtube.com/watch?v=NDWZ11Z3IDA



Para iniciar esta ruta lo hacemos desde el rincón de la Victoria, justo en el mismo lugar donde finalizamos la etapa anterior.


Tomamos el paseo marítimo Virgen del Carmen dirigiéndonos hacia levante.


Existe en la playa un vial en la arena compactada que se utiliza para las bicis y senderistas, por lo que se puede ir más cómodo por ella.


Seguimos viendo los tradicionales espeteros, sin duda lo más característico de la Costa del Sol.


Tras el Rincón de la Victoria alcanzamos la playa de Torre de Benagalbón. Esta playa es una de las playas más populares del municipio malagueño de Rincón de la Victoria. Cuenta con una extensión de 3. 400 metros de largo de arena oscura y unas aguas tranquilas que permiten disfrutar de un baño en calma.


Visitada principalmente por los vecinos de la zona que acceden fácilmente a pie o en autobús urbano. Es ideal para practicar deportes acuáticos e incluso jugar al golf en el campo de Añoreta.


Al paso encontramos la Estación de tren de Benagalbón Se trata de uno de los apeaderos de la Compañía de los Ferrocarriles Suburbanos de Málaga (FSM), que cubría la línea entre Vélez Málaga y la capital. La empresa contaba con varias líneas. La primera en inaugurarse, la de Vélez, partía de una estación situada en el actual barrio de La Malagueta; pero con la entrada en funcionamiento de la línea de Coín la cabecera se había trasladado al edificio de la antigua estación que hoy se conserva junto a la entrada al Puerto de Málaga. A esta nueva estación se añadió la entrada en funcionamiento de la línea a Fuengirola.


Alcanzamos una zona adecuada para poder observar las diferentes plantas propias del litoral, así como unos miradores con unos carteles informativos que nos proporcionan información de la diversidad de especies marinas y otros aspectos geológicos.


Dejamos a tras Benagalbón, siguiendo el camino paralelo al mar. Esta parte del litoral permanece un poco menos masificado. Son largas extensiones de playas muy frecuentadas por los aficionados a la pesca deportiva, dando un pequeño respiro urbanístico hasta alcanzar otras urbanizaciones.


El camino en todo momento va paralelo al mar y la carretera Nacional 340, el cual nos acerca a los conjuntos residenciales de Las Palmeras, Balcones del Mar.


Visible tímidamente entre las viviendas de la Urbanización alcanzamos la Torre Vigía de Chilches de 8 metros de altura construida en el siglo XVI en forma troncocónica con un cuerpo inferior macizo, sobre el que se dispone una habitación en la parte superior que cuenta con una entrada superior.


Seguimos nuestro camino entre zonas residenciales para llegar a Benaljarafe. Esta localidad tiene su origen en una antigua alquería medieval del territorio de Vélez. Nada que ver con el aspecto que tiene en la actualidad.


Aquí también se encuentra en una loma a 15 metros sobre el nivel del mar la Torre Moya o Torre Gorda, construida en el siglo XVIII. Se trata de una típica torre de pezuña, con base semicircular prolongada en dos brazos rectos y frente formado por dos espigones sobresalientes. 

 Los legendarios centinelas de la Costa del Sol.

El litoral oriental de Málaga ha sido desde siempre un lugar ideal para el asentamiento humano. Así lo demuestran los yacimientos fenicios en el Yacimiento de Toscanos situado en el Cerro del Mar, donde encontraron un asentamiento datado en el siglo VIII a.C. que pudo albergar un gran grupo de individuos en un emplazamiento construido con casas alineadas en calles o plazas. En la barriada de El Palo, también hallaron los restos de una mina de hierro y una hendidura que se usaba como cisterna para almacenar agua.


Pero no solo los fenicios ocuparon estos territorios, también hay vestigios de la presencia de otras culturas, como demuestra el yacimiento griego de Mainake, la necrópolis púnica “El Jardín” en Torre del Mar o los restos de la antigua ciudad romana de Maenoba, donde se encontró un ánfora romana que aún guardaba vino en su interior. Así se demuestra a lo largo del tiempo, la gran importancia que tenía este territorio para todas las culturas que buscaban una vida mejor gracias a la riqueza del mar y la productividad de unas tierras fértiles en cultivos.
Durante los siglos XIII y XV los musulmanes tuvieron una importante presencia en Vélez Málaga, sobre todo en la época nazarí, la cual alcanzó su mayor expansión gracias a su gran desarrollo urbanístico como ciudad por la ejecución de importantes obras civiles y la construcción de edificios, entre ellas su fortaleza – alcazaba y el Barrio de la Villa, antigua medina musulmana. La ciudad crece en importancia y nace la necesidad de defenderla de posibles ataques y asedios por parte de otras culturas, emplazando en la línea costera las primeras torres vigías nazaríes como la Torre del jaral. Tras la reconquista estas torres cobrarían una gran importancia de vigilancia y comunicación entre ellas y el interior. Aunque fue, durante los reinados de Carlos I, Felipe II y Carlos III donde nació la necesidad de construir otras para defender y controlar las incursiones de piratas berberiscos, principalmente en la Región de Murcia, Alicante y todas las provincias costeras andaluzas.

En esta época España, y el Papado luchaban contra el imperio Turco que intentaba dominar el mediterráneo con sus ejércitos y una gran flota de galeras. Aunque el verdadero peligro nacía de los piratas turcos y berberiscos que atacaban constantemente las costas españolas saqueando y desestabilizando el comercio marítimo del mediterráneo. En siglos posteriores se construyeron algunas torres más de refuerzo, así como algunos castillos o fuertes. La mayoría de estas torres se usaron hasta el siglo XIX, quedando estos al servicio de Carabineros o la Guardia Civil.



Salimos de las zonas residenciales acercándonos al mar, esta vez transitando por viviendas situadas en primera línea de playa, algunas de ellas ajardinadas, con plantas propias de los climas subtropicales como palmeras, yucas, palmitos y cactus, adornan bellamente el lugar.


De nuevo entramos en playas amplias muy poco masificadas que nos llevaran a alcanzar la Urbanización Valle Mar.


Es en este lugar donde abandonamos la playa en la desembocadura del Arroyo de Íberos, remontando la rambla pasando por debajo del puente que atraviesa la carretera Nacional 340.


Debemos remontar la rambla de este arroyo durante unos metros y estar atentos al hito que marca el GR. Este se encuentra fuera del cauce a la derecha. Hay que subir por una empinada y muy corta vereda entre el muro de piedra para seguir nuestro camino.


Nada más salir de la rambla, cruzamos la carretera asfaltada para continuar por una pista de tierra que encontramos a la izquierda.


A partir de este momento la ruta se aleja de la playa para ir metiéndonos poco a poco por el interior de este territorio alcanzando en primer lugar el Castillo del Marqués de Valle – Niza, un fuerte o batería costera típica del Siglo XVIII que en aquella época defendía la costa de los posibles asedios. Este fuerte está formado por un baluarte semicircular unido a un hornabeque. El interior está caracterizado por su distribución alrededor de un patio rectangular, como patio de armas con una escalera de subida al baluarte y una rampa para bajar los cañones. En la actualidad es sede de la Escuela de Hostelería y Turismo.


Seguidamente alcanzaremos de nuevo la Carretera Nacional 340 y durante un corto trayecto nos llevará a tomar un camino de tierra a la izquierda.


Este camino nos subirá rodeando el cerro hasta la cima de un acantilado de 30 metros de altura que cae sobre la carretera. Aquí es donde se encuentra la Torre del Jaral, una torre vigía de 10 metros de altura de planta cuadrada de origen nazarí construida entre los siglos XIII –XIV, posiblemente rescatada y modificada en siglos posteriores.


Su planta es cuadrada y restaurada en parte. Su situación es muy estratégica y privilegiada, ya que fue construida junto al Camino Real de Granada y divisaba una amplia zona marítima incluyendo las ensenadas de Valle de Niza y Almayate.


Nos alejamos de la torre tomando el Camino del Tajo del Pinto sorteando el barranco por un alto puente de un solo ojo construido en el siglo pasado. Siguiendo por este camino nos llevara de nuevo a adentrarnos por las zonas residenciales que existen en el lugar.


El Camino deja atrás la Urbanización Monte Azul internándose esta vez por zonas de cultivo. Al poco tiempo llegaremos a Almayate, otra de las diversas zonas residenciales típicas de la Costa del Sol.


Dejamos a tras Almayate, último núcleo poblado antes de llegar a final de etapa, por un camino que se acerca a una zona de cárcavas cuyas paredes erosionadas a modo de grandes viseras sirven de abrigo natural para el ganado.


Al poco llagamos al Cerro del Mar, donde existe un yacimiento Arqueológico de Toscanos, un antiguo emplazamiento fenicio del siglo VIII a. C. asentado como era común en esta cultura, en un territorio con abundante agua dulce, posición aislada y de fácil defensa. Se estima que pudo albergar entre 1000 y 1500 habitantes dedicados principalmente a la agricultura, la ganadería, la pesca y la industria textil.


Continuamos nuestro camino entre campos de cultivo y algunas naves agrícolas al margen del río Vélez. Estamos en una zona donde abundan grandes parcelas de labor, que junto al turismo es uno de los principales motores económicos de esta comarca.


Tras pasar por debajo de la autovía A -7 bajo un colosal puente de hormigón llegamos a la carretera comarcal C- 335. Solo tenemos que continuar por esta carretera a la derecha para alcanzar en poco tiempo nuestro destino.


Por fin llegamos a Vélez Málaga, nuestro destino y final de etapa Para entrar en la ciudad lo hacemos por el puente sortea la carretera A -356 y que da acceso al casco urbano. Enseguida alcanzaremos la Calle Camino Viejo de Vélez que nos adentrará al centro de la ciudad. 

Cómo llegar 

Para comenzar esta ruta desde el Rincón de la Victoria hay que tomar la autovía del mediterráneo A – 7 y tomar la salida 254. En la rotonda hay que tomar la segunda salida y alcanzar la carretera MA – 24. Tomar la primera salida a la derecha y hacer la rotonda para tomar la Nacional 340 que cruza todo el pueblo. Se puede comenzar desde los túneles de La cala del Moral o desde cualquier otro punto en el Paseo Marítimo Virgen del Carmen.

 Alojamientos y Comida 

Para alojarse o comer en esta zona de Málaga no hay ningún problema, ya que estamos en un sitio muy turístico donde existe una gran oferta de servicios. No obstante para comer recomiendo hacerlo en Restaurante el Deo. Su especialidad es el pescado fresco y los espetos. Antiguamente este restaurante estaba situado en la localidad de El Palo donde era muy popular. En la actualidad ha sido trasladado a la localidad del Rincón de la Victoria y sigue ofreciendo el mismo trato y calidad que antaño. Así que comer bien a buen precio está garantizado.

Restaurante El Deo 

Avd. de la Axarquía, 39,
29738 Rincón de la Victoria (Málaga).
Horario: de 11:h a 24:00 h.
Teléfono: 682172712
htpps://m.facebook.com/Restaurante-El-Deo-114247658778840/ 

 Más información: granembolao@gmail.com