Hola a todos. He creado este blog, con la intención de que exista un lugar en la red, abierto para compartir experiencias, proyectos e ideas. Me considero una persona jovial, amante de nuestro planeta, viajero, soñador y apasionado de nuestro entorno. Me gusta viajar, realizar deportes en contacto con nuestro medio natural, para disfrutar con familia y amigos de largas jornadas de entretenimiento. Todo para aprender. Quiero con esto invitar a que se acomoden en el diván de la tertulia, y comunicar aquello que os entusiasme y os ayude a soñar. A partir de aquí, tenemos mucho que hablar.

“La Tierra y el cielo, bosques y campos, lagos y ríos, las montañas y el
mar son excelentes escuelas que nos enseñan muchísimas cosas que no se pueden
aprender en los libros”.

John Lubbock


miércoles, 16 de febrero de 2011

Parque Nacional de Doñana


Aprovechando algunos días libres que nos proporcionara la Semana Santa de los años 2006, 2007 y 2009, decidimos visitar la parte del Parque Nacional de Doñana, perteneciente a la provincia de Huelva. Para esto marcamos tres objetivos fundamentales que llevaríamos a cabo; visitar los pueblos más cercanos al parque, empapándonos de su cultura y forma de vida, realizar algunas rutas a pié por el entorno y adentrarnos por del parque si fuera posible. A mi parecer, Doñana es uno de los espacios protegidos más fascinantes y frágiles de nuestro país, además de ser inaccesible, salvaje, y con un carácter que lo hace ser único en el mundo.


“ Platero – le dije - ; vamos a esperar las carretas.
Traen el rumor del
lejano bosque de Doñana, el
misterio del pinar de las Ánimas, la
frescura de
las Madres y de los dos Fresnos, el olor de la
rocina…”

Juan
Ramón Jiménez.

Platero y Yo. Capitulo XLVII.




Historia del territorio

La historia de Doñana comienza con los asentamientos de romanos del siglo II a C. situados en torno a las marismas del Guadalquivir, cuyos pobladores se dedicaban principalmente a la pesca. Es en el siglo XVI cuando estos parajes empiezan a ser conocidos gracias a la construcción en lo más profundo del bosque, del palacio del séptimo duque de Medina - Sidonia dedicado a su esposa, Doña Ana Gómez de Mendoza y Silva. Los bosques de los alrededores, pronto son conocidos como el bosque de Doña Ana, después por el “coto de Doña Ana”, hasta que finalmente adopta la denominación que en la actualidad se conoce. En 1978 se crea el Parque Nacional de Doñana, que será ampliado y reclasificado por su ley de régimen jurídico de ese mismo año. Desde entonces diversas figuras de protección internacional confluyen en este territorio. Doñana es patrimonio de internacional y reserva de la biosfera.

El Parque Nacional

El parque comprende un espacio reservado de 55.337 ha. donde podemos encontrar una gran diversidad de especies y biotopos. A demás de la marisma, existen un conjunto de zonas ambientales excepcionales por su productividad y belleza: la playa, las dunas vivas y los corrales; el monte, los sabinares, alcornocales y pinares más conocidos como “los cotos”, algunas lagunas dispersas entre la vegetación y una zona de confluencia que enlaza y separa a todos, “la vera”. Todo esto hace de este parque tener una personalidad única.


La Playa en la Costa Atlántica.

Esta playa es la creadora de todo. Como hace más de 6.000 años, sigue recogiendo las arenas arrastradas por el mar cerrando el estuario del Guadalquivir y cambiando contante mente la fisionomía de esta costa. Recorriendo los 30 kilómetros de esta playa virgen y salvaje, encontramos diversos paisajes creados por las constantes mareas, donde descubriremos varios asentamientos de mariscadores y la presencia de torres almenaras construidas en el siglo XVI, las cuales servían para vigilar las incursiones de los piratas berberiscos.


Desde el Centro de Interpretación El Acebuche salen unos 4 x 4 adaptados para recorrer el Parque. La entrada al Parque la tomamos en la playa de Matalascañas para recorrer la costa antes de acceder al interior de Doñana.

El primer encuentro lo tenemos con las dunas que preceden a los 30 kilómetros de playas vírgenes.
Cerca de Matalascañas encontramos los pocos y últimos asentamientos de familias de pescadores que quedan en el Parque.

Otra presencia de Torres almenaras construidas en el siglo XVI.

En la orilla de la playa encontramos aves costeras como: gaviotas, ostreros, charranes correlimos, limícolas y garzas.

El final de esta franja de costa llega hasta la desembocadura del Río Guadalquivir en San Lucas de Barrameda.


La Vera


A continuación aparece la vera, una línea de contacto o franja de 200 a 1500 metros de anchura que divide los ecosistemas arenosos y la marisma. Aquí descubrimos un paisaje que mantiene la humedad del manto subterráneo de agua, lo que hace ser una zona muy apreciada por la fauna que habita en el área de Doñana. La presencia de alcornoques, restos de bosques antiguos en el matorral inmediato a la vera confiere a este enclave características excepcionales, pues son las perchas donde se asientan grandes colonias de aves.


Recorremos en el 4 x 4 la Vera, una zona habitual de paso de ciervos, gamos y jabalíes, al igual que los pinares donde podemos observar algunas especies de aves rapaces.
La observación del lince ibérico es menos usual, pero si estamos atentos podemos tener sorpresas como esta; el paso de un jabalí hembra con sus jabatos o rayones.

Otra sorpresa, encontramos en la Vera a este joven ejemplar de ciervo.

El Coto


El bosque de pinos comprende una estampa típica en la fisionomía de Doñana, ya que el pino piñonero es el árbol típico del área. Destaca es Pinar de las Marismillas, compuesto por un denso estrato arbustivo de gran desarrollo, formando por sabinas y lentiscos principalmente. Aparecen zonas abiertas de herbáceas donde se pueden observar gamos, ciervos, jabalí o caballos salvajes en libertad.

Llegamos en nuestros vehículos al Coto y echamos pie a tierra para adentrarnos por el bosque.

Nos asomamos a Los Prados de Velázquez, nombre que se debe al ilustre pintor y donde encontramos un extraordinario paraíso natural con abundantes especies de caballos salvajes, jabalí, ciervos y gamos que vemos a lo lejos.

El Poblado de La Plancha nos da a conocer interesantes aspectos de los habitantes de estos bosques. Las chozas de juncos dan testimonio de otros tiempos cuando eran utilizadas en las monterías de los propietarios de estas tierras.

En el matorral seguimos observando los vegetales predominantes de este bosque, sobre todo el de monte blanco en zonas elevadas y secas y monte negro en zonas deprimidas y húmedas.

Uno de los recursos principales de estas gentes es la producción de carbón vegetal que elaboraban en carboneras como ésta.

La producción de miel también estaba presente en la vida de Doñana. No era difícil encontrar colmenas elaboradas en troncos de árboles como esta.

Las Marismas


Las marismas es el mayor ecosistema en extensión que imprime mayor carácter al Parque Nacional, unas 27.000 ha., y que otorga a este espacio una personalidad inconfundible. Es una zona húmeda de extraordinaria importancia como lugar de paso, cría e invernada para las aves europeas y africanas. La marisma ha perdido la relación con el mar o con el río que la formó, y se ha convertido en una llanura mal drenada, surcada por cauces elevados. La mayor parte se inunda gracias a algunos arroyos y a las aguas de lluvia, lo que hace que presente una estacionalidad muy marcada. Existen zonas muy profundas que permanecen encharcadas largos periodos de tiempo, conocidas como “lucios”. En ellos la alta salinidad impide casi por completo el crecimiento de la vegetación, lo que provoca que una gran contingencia de aves acudan en sus movimientos migratorios.


En la marisma, si se encuentra inundada podemos observar gran variedad de aves europeas o africanas. Un ejemplo de esto lo podemos ver en el Lucio del Membrillo, cerca de Vetalengua, donde existe un observatorio para observar las especies de aves que hasta aquí acuden.

Observación en grupo.

En la otra orilla del río, cruzamos la pasarela para observar las aves.

En esta gran charca podemos ver una numerosa colonia de flamencos rosados.
No es difícil encontrar a ornitólogos observando las aves.

Puesto de observación.


Las Dunas Móviles


Constituyen uno de los paisajes más espectaculares de Doñana, formado por grandes extensiones de arena fina que se vuelcan sobre los escasos pinares que a duras penas sobreviven. La playa enlaza con las dunas móviles o vivas. La arena arrastrada por el viento “foreño” de componente suroeste va formando un sistema de dunas que avanzan desde el litoral hacia el interior avanzando a través de los distintos frentes dunares o corrales en los que la humedad del subsuelo hace crecer una vegetación de pinos y matorral.

Llegamos al último ecosistema que nos queda por ver. Un mar de arena se muestra ante nosotros con un impresionante color dorado que contracta con el intenso verde del bosque.
Las dunas nacen en la playa. Los vientos que vienen del SO. amontonan los granos de arena alrededor de alguna mata de barrón u otro obstáculo cualquiera. Con estos aportes las dunas pierden su estabilidad y empiezan a moverse.
Al moverse empiezan ajuntarse unas con otras para formar grandes medanos que avanzan en paralelo hasta el interior.
Descansando en el Cerro de los Ánsares, antes de regreso al Centro de Visitantes.


Pueblos del entorno de Doñana



En los alrededores de Doñana podemos encontrar parajes y poblaciones con una identidad propia desde tiempos remotos. Las peculiares características geológicas de estos lugares y las precipitaciones anuales, provocando que los territorios se inunden en invierno y se desequen en verano, han dado lugar a un ecosistema único en el mundo, donde sus pobladores viven de una forma privilegiada. Las marismas, los bosques, las playas vírgenes de fina arena en forma de dunas, conforman un territorio donde la vida y la naturaleza se muestran libres y salvajes en todo su esplendor. Los habitantes de estos pueblos viven principalmente de los recursos que ofrecen la desembocadura del río Guadalquivir, los distintos espacios naturales que lindan con el Parque Nacional y la costa atlántica.



Almonte


El término municipal de Almonte estuvo poblado en la edad de bronce y probablemente la población actual esté asentada sobre otra población romana. En el siglo XV la compró el Duque de Medina Sidonia y Conde de Niebla. Perteneció al condado de Niebla hasta que las Cortes de Cádiz puso fin a la situación terminando con los señoríos. Almonte es un pueblo sobre todo agrícola y turístico, cuenta con rentas económicas altas , basada en la explotación de viñedos, cereales y hortalizas; junto a los ingresos que aportan las zonas turísticas de la Higuera y Matalascañas . Almonte cuenta con numerosas bodegas donde se pueden encontrar excelentes vinos jóvenes afrutados y vinos más viejos y de más cuerpo. Debido a la romería del rocío a hecho renacer la industria de la guarnicionería.


En Almonte, nuestro interés se centra en visitar la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.
Este templo alberga la imagen de la Virgen, trasladada desde la aldea del Rocío cada 7 años. El primer traslado que se conoce está documentado en el año 1607.

Si coincide la hora del almuerzo se puede comer en el restaurante “La Posada” en el centro de Almonte. Su especialidad son los guisos marineros, las carnes y pescados frescos del litoral de Huelva. Recomendamos su lubina, bacalao y sus almejas marineras, siendo un verdadero gusto para el paladar.



Matalascañas


Matalascañas pertenece al término municipal de Almonte. Es zona de playa y uno de los más importantes recursos económicos de la zona por la influencia del turismo. Esta playa se extiende a lo largo de 7 Km. Tiene una parte urbanizada que está muy bien equipada, pero a medida que te alejas de Matalascañas se desertiza adentrándose en el Parque Nacional de Doñana. Este es un lugar excelente para alejarse o perderse.



Nos encontramos en el paseo marítimo de Matalascañas, el cual está muy bien equipado y lleno de servicios.
Un monumento que nos dice que estamos en una comarca marinera.

Restos de una torre almenara que servía para vigilar los contantes ataques de los piratas berberiscos.

Se acaba la parte urbana de Matalascañas dando paso a una playa virgen, desértica y solitaria.


El Rocío


En la segunda mitad del siglo XIII, Alfonso X el Sabio mandó construir una capilla al borde de las marismas a causa de la aparición de la virgen. Era un lugar apartado y de difícil acceso. Los Almonteños conocían muy bien esos lugares y los habían visitado en busca del ciervo, la anguila o la enea. Pero, a finales del siglo XIII tendría otro motivo para acudir a esos lugares: una pequeña capilla y una bonita virgen que tomó el nombre de la Virgen de la Rocina y que poco después llamarían Rocío, habitaba las marismas. Durante largos años la ermita y la virgen quedaron solas hasta que los Duques de Medina Sidonia hicieron de la aldea un cruce de caminos donde se instalaron una venta y alguna que otra choza que la convirtieron en aldea. Poco a poco la virgen se arraigó entre los Almonteños hasta que en 1653 la aclamaron como su patrona.

Paseando por la aldea del Rocío encontramos unas calles sin asfalto que nos transportan a otra época.
Monumento erigido en honor a las hermandades rocieras.

Felix y Jose junto a las marismas.

Las marismas que encontramos junto a la aldea es una zona de inundada de agua que se adentra en el mismo parque de Doñana y donde podemos darnos cuenta del valioso y salvaje territorio que nos encontramos.

Nuevo santuario construido entre 1964 y 1969, sustituyendo por quedarse pequeña la anterior ermita erigida en 1760.

En esta capilla es donde se ubica la imagen de la virgen cuando es trasladada desde el templo de Almonte.

La Pensión Isidro es el sitio elegido para alojarnos. Si comeis aqui, recomendamos su exquisito tocino de cielo.


San Lucas de Barrameda.


Sanlúcar de Barrameda es uno de los municipios de Cadíz más conocidos a nivel internacional gracias a la gastronomía rica en sus vinos y mariscos, además de las afamadas carreras de caballos que se realizan a la orilla del estuario del río Guadalquivir, frente al Parque Nacional de Doñana. Dista 44 km de la capital de Cádiz y desde la antigüedad, fue territorio de asentamientos de Tartesos y fue posteriormente mencionada en diferentes textos romanos y medievales. En el año1297, fue otorgada en señorío a Guzmán el Bueno, creciendo la ciudad gracias al impulso económico que propició el puerto de Barrameda. Posteriormente, entre los siglos XV y XVII, tras la conquista de los castellanos, y en época de las exploraciones a lejanas tierras, la ciudad fue protagonista de la colonización y evangelización de América.


Vista general de San Lucas de Barrameda desde el Parque Nacional.

La Ermita de Guía fue fundada en el camino del bajo de la playa de ahí su nombre. La Virgen Nuestra Señora de Guía hace honor a su nombre al guiar a los navegantes.

Para alojarnos elegimos este magnífico hotel que su nombre sugiere donde nos encontramos.

El embarcadero de Bajo de Guía, donde además de embarcar para pasar a la otra orilla del río, es el punto donde se toma el barco para realizar la ruta por Doñana.

San Lucas de Barrameda es un pueblo lleno de contrastes, donde podemos ver también en sus cielos la práctica de otros deportes.

En cualquier restaurante del paseo de Bajo de Guía se pueden saborear el pescado fresco, el marisco o unos exquisitos guisos marineros.

Chipiona


El término municipal de Chipiona se halla enclavado en el Noroeste de la provincia de Cádiz. Limita con los términos municipale de Sanlúcar de Barrameda, Rota y la desembocadura del Guadalquivir. En la antigüedad, según los textos antiguos, existió un faro en la desembocadura del río Guadalquivir, construido por los romanos, los cuales lo llamaron, “Turris caepionis” y que según la tradición, ha dado nombre a Chipiona. La ciudad fue reconquistada por el rey Fernando III el Santo en el año 1251, volviéndose a reconquistar definitivamente en 1264 por su hijo Alfonso X el Sabio. Chipiona formaba parte del señorío de Guzman el Bueno construyéndose el Castillo. Al casar Isabel Pérez de Guzmán, una de las hijas del I Señor de Sanlúcar, con Fernán Ponce de Léon, llevó en dote matrimonial Rota y Chipiona, independizándose ambas del Señorío de Sanlucar en 1303 e incorporándose a las posesiones de la familia Ponce de León.


El principal atractivo de Chipiona son sus playas de blanca y donde también se practica la pesca y deportes acuáticos. En la Paya de Regla podemos ver el mítico faro situado en la Punta del Perro el cual con sus 69 metros de altura es el tercero más alto del mundo.

El Santuario de Nuestra Señora de Regla de Chipiona se levantó sobre la antigua fortaleza de los Ponce de León en el siglo XIV. Restaurado en el XVII y acabado entre 1835 y 1882, fue luego acondicionado por la comunidad de franciscanos misioneros, que lo levantaron de sus ruinas con la ayuda de los Duques de Montpensier.

La Virgen de Regla es una de las advocaciones de la Virgen María y según cuenta la tradición, fue llevada a Chipiona por los discípulos de San Agustín desde el Norte de África, cuando huyeron de la invasión de unos vándalos.

Cartel informativo del Ministerio de Medio Ambiente donde explica el proyecto de recuperación de las dunas.
Las playas de La Laguna y Las Tres Piedras, donde se realizan las obras consistentes en la regeneración del sistema dunar mediante la instalación de artefactos captadores de arena, la recuperación de la cubierta vegetal mediante la plantación de especies autóctonas propias de ecosistemas dunares y la limitación de la excesiva presión de visitantes en las zonas más frágiles.
Pili en una de las pasarelas que dan acceso a las playas.


El Entorno de Doñana. Preparque


Doñana es un territorio conformado por más de 100.000 ha. de espacio natural, considerándose como una de las áreas naturales más valiosas del continente europeo. En 1997 se aprueba el Plan Rector de uso y gestión del parque natural y alcanza una superficie actual de 44.663 ha, quedando el resto como Parque Natural protegido con una superficie total de 55.337 ha. Existen un conjunto de centros de visitantes, situados en el parque y una serie de servicios y rutas con actividades que se ordenan en tres ejes básicos y que corresponden con las tres principales vías de acceso a Doñana: Huelva, Cádiz y Sevilla.


Centro de Visitantes José Antonio Valverde



El Centro de Visitantes José Antonio Valverde hace honor a uno de los pioneros en la conservación de este espacio natural, aunque también es conocido por Cerrado Garrido, topónimo de la zona. En este centro el visitante encontrará exposiciones con temas relacionados con la marisma, uno de los principales ecosistemas del Espacio Natural Doñana.
También recoge información sobre las actividades organizadas por empresas que operan en el entorno y sobre los equipamientos de uso público ofertados en la zona. Junto al centro existe un lucio donde podemos apreciar la vegetación típica y la riqueza de avifauna que habita en estas lagunas, junto con las transformaciones que el hombre ha realizado en ellas.


Este es el Centro de Visitantes más difícil de llegar si utilizamos un vehículo particular. Existe un acceso público con indicaciones desde Sevilla por la Puebla del Río y otro desde Villamanrique de la Condesa, aunque esta última no está muy bien señalizada y los caminos que conducen a esta zona están en muy mal estado. El acceso desde El Rocío, más fácil y corto, está limitado a vehículos autorizados como los Discovering Doñana, que es una empresa autorizada por el Parque Nacional.

Antes de llegar al Centro de Visitantes hacemos una parada para observar las marismas, un ecosistema húmedo con plantas herbáceas que crecen en el agua. Son muy importantes para la vida salvaje siendo uno de los hábitats preferidos para criar una gran variedad de vida; desde diminutas algas hasta una abundante cantidad de flora y fauna, fundamentalmente aves.

Aquí podemos ver tras los caballos, algunos ejemplares de “moritos”. El morito común es el único ibis europeo y por suerte lo tenemos en España aunque este ave está extendida por otros continentes como África, Asia y hasta América.

Una marisma es diferente de una ciénaga, la cual está dominada por árboles en vez de herbáceas. El agua de una marisma puede ser dulce o del mar, aunque normalmente es una mezcla de ambas, denominada salobre. Las marismas costeras suelen estar asociadas a estuarios, éstas se basan comúnmente en suelos con fondos arenosos.

Llegamos al Centro de Visitantes, donde vemos una impresionante choza, construida al estilo tradicional marismeño.

En su interior se halla una exposición sobre el Parque con sala audiovisual, un pequeño bar con tienda de recuerdos y servicios.

También recoge una muestra de restos de restos óseos y plumas pertenecientes a algunas especies de aves que habitan en Doñana.

En el Centro también hay habilitados unos miradores acristalados equipados con prismáticos y telescopios para observar las especies que se encuentran en el lugar.

Es en estos parajes donde, se encuentran los ecosistemas más extraordinarios de Doñana. En las marismas más profundas existen zonas conocidas por “Lucios”, las cuales permanecen encharcadas durante periodos más largos, con una vegetación más escasa a causa de la alta salinidad existente. En verano pueden desecarse totalmente apareciendo zonas de limos con costras blanquecinas por acumulación de sal.

En invierno los lucios son sitios extraordinarios para el avistamiento de avifauna, por la concentración de numerosas especies.

El Centro también es de gran importancia a nivel europeo gracias a la gran abundancia de especies en peligro de extinción que se encuentran en el Lucio de Gangas, donde nidifican moritos, fochas cornudas, garzas imperiales etc., además de 160 especies bien localizadas.

Centro de Visitantes Los Centenales


Este centro, construido en 2004 por iniciativa principal del ayuntamiento de Hinojos, es el único equipamiento de acogida del municipio, considerado junto con Almonte la principal puerta de entrada al Espacio Natural Doñana. Consta de una laguna artificial con vegetación natural, que rodea parte del edificio, y repoblada con peces autóctonos. Muy cerca, encontramos reproducciones a escala de las cabañas típicas de la marisma, donde es fundamental como materia prima vegetal la castañuela. Además, se enmarca dentro un estupendo parque urbano, con múltiples paseos y agradables sombras, más zonas de juegos infantiles. Así, constituye un lugar donde se celebran diferentes festejos del municipio y es punto de encuentro de las Hermandades del Rocío.

El singular edificio, de diseño moderno pero integrado en el entorno, permite observar el paisaje a través de sus amplias cristaleras.

En su interior, la exposición muestra las costumbres y aprovechamientos de Hinojos y los principales ecosistemas del Parque Nacional de Doñana: Marismas y Pinar. Todo ello a través de numerosos paneles explicativos acompañados de reproducciones y maquetas diversas, una pasarela audiovisual y una recreación de los sonidos nocturnos.

Centro de Visitantes El Acebuche


A tres kilómetros de Matalascañas se encuentra este centro que organiza y coordina a los demás centros de visitantes, y que es punto de entrada y salida de la ruta que se puede recorrer por el interior del Parque nacional en todo terreno. El Acebuche se encuentra entre lagunas, en una zona de monte blanco donde se ha habilitado un sendero que discurre por la orilla sur de una antigua laguna,donde apreciaremos desde algunos observatorios varias especies de fauna acuática que habita la zona.


Centro de Visitantes El Acebuche.
Cartel informativo que explica el itinerario que vamos a realizar.

La Laguna del Acebuche.

Siguiendo la ruta sobre la pasarela, esta nos lleva hasta siete observatorios que nos permiten observas la fauna acuática de esta zona.

Uno de los puestos de observación habilitados en el itinerario. Debemos permanecer en silencio para no ahuyentar a las aves.
La cría de abejas, en los troncos vacíos para la producción de miel es una de las diferentes exposiciones al aire libre que encontramos en el trayecto.


Centro de Visitantes La Rocina


Muy cerca de la aldea del rocío se encuentra el Centro de Visitantes La Rocina, donde se encuentra una exposición del Parque Nacional y una réplica de las chozas de los antiguos romeros que se asentaban en la zona. Desde aquí se puede iniciar una ruta por el sendero “Charco de la bota”, el cual recorre el margen izquierdo del arroyo de la Rocina. Aquí encontraremos varios puestos de observación de fauna acuática y magníficos paisajes diversos.


Centro de Visitantes La Rocina
En los alrededores del centro encontramos una choza donde se expone aspectos de la forma de vida de los antiguos rocieros.

En el interior de la choza donde se encuentra una interesante exposición.

Cartel informativo del itinerario “Charco de la Bota”.

El recorrido discurre entre un bosque de Pinos piñoneros acercándose a cuatro puestos de observación que se encuentran alrededor de la laguna Charco de la Bota.

Felix y Jose en la pasarela de este itinerario

Centro de Visitantes Palacio de Acebrón.

Este palacio fue construido a principios de los años 60 por D. Luís Espinosa Fontdevila, quién por aquella época era dueño de estas tierras. Posteriormente quedo abandonado hasta que en los años 80 es adquirido junto con los terrenos colindantes por el Parque Nacional para reconvertirlo en Centro de Visitantes.

Centro de Visitantes Palacio de Acebrón. Lo encontramos en el espacio protegido de La Rocina.

En su interior encontramos una exposición de los usos tradicionales de la tierra de Doñana.

José encontró un amigo con el que cambia impresiones.

Desde los exteriores del palacio empieza el itinerario que se adentra por la zona protegida donde encontramos varios escenarios naturales.

El primer escenario es el más singular por ser un bosque de ribera con una extraordinaria formación vegetal de la era terciaria.

Encontramos también el lago, el cual se presenta con todo su esplendor.




Centro de Visitantes Fábrica de Hielo


Este centro se encuentra en el barrio marinero Bajo de guía de San Lucas de Barrameda en la provincia de Cádiz, concretamente en la desembocadura del Río Guadalquivir. Antiguamente fue la fábrica que proporcionaba hielo para la conservación del pescado, gestionada por la cofradía de pescadores. En la actualidad es centro de recepción e información para el visitante sobre el Parque Nacional de Doñana y su entorno. En sus dos plantas alberga exposiciones sobre los valores naturales del parque y la historia de Doñana y el bajo Guadalquivir.


Centro de Visitantes Fábrica de Hielo.
Exposición repartida en dos plantas donde muestran los valores naturales del Parque nacional y Parque Natural de Doñana.
El “Buque Real Fernando”. Se trata de una réplica del barco de vapor que surcaba antiguamente estas aguas. Está dotado con una tecnología moderna de navegación con una capacidad para 94 pasajeros.
Navegamos muy cerca de la orilla para poder observar de cerca este ecosistema.
Avistamos el Poblado de la Plancha en pleno Coto de Doñana.
Desembarcamos en el poblado para recibir algunas explicaciones de nuestros guías.

Parque Natural de Las Marismas de Bonanza.


En la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda se encuentran las Marismas de Bonanza, muy cerca de la desembocadura del Guadalquivir, incluida dentro del Parque Natural de Doñana. Su situación geográfica, en la confluencia de las regiones mediterránea y atlántica, convierten a las marismas en el último eslabón europeo en las rutas migratorias Europa-Africa, y en una importante área de invernada y cría de aves acuáticas. Propios de las marismas, en las superficies encharcadas de bayuncos y castañuelas, se puede observar el ánsar común, el pato colorado, o el ánade real; entre las eneas y carrizos destaca el calamón, y el flamenco.

Cartel informativo que da entrada al parque.
Salinas cerca de San Lucas de Barrameda. La producción de sal ha sido desde siempre un recurso importante en esta comarca.
Estos ramales en la marisma queda inundada por el agua del río Guadalquivir, al contrario que otras marismas que son inundadas por la lluvia.

Este sitio es ideal para la observación de muchas especies de aves acuáticas.
Observando una colonia de flamencos desde la orilla de una de las lagunas.
Una espectacular imagen de las marismas.

El Pinar de La Algaida


Se encuentra limitando la ciudad de San Lucas de Barrameda, en la provincia de Cádiz. Este pinar ha sido repoblado desde principios del siglo XIX por la mano del hombre. En él se puede encontrar una gran colonia de milanos y donde se localiza el Tesorillo un recinto sagrado dedicado al Lucero, así como el Pozo de los Caveros de origen romano. La Algaida está poblada, en casi su totalidad, por un pinar creado para producir leña y los frutos del pino piñonero. Actualmente este paraje se ha convertido en el hábitat del camaleón, una especie en grave riesgo de extinción. En este espacio, se encuentran diferentes especies vegetales, que además del pino piñonero, existe un matorral compuesto por jaras, lentiscos y brezos. Una incomparable variedad de aves pueden ser observadas como calamones, cigüeñas, flamencos, grullas etc… A causa de estos atractivos este enclave se ha convertido en zona de ocio y recreo para los vecinos de San Lucas.



Entrada al Pinar. Aquí se encuentran varios carteles que dan información sobre la zona que estamos.

El Pinar está, emplazado sobre un primitivo sistema dunar que se halla a su vez sobre una antigua islabarrera.
La lista de aves que nidifican, invernan y sobre vuelan este pinar es realmente elevada. Además de las especies más comunes y extendidas de los pinares nidifican otras como, la abubilla, o el abejaruco...

También se han habilitado varias áreas recreativas para el disfrute y descanso de los visitantes.

“ La Ermita del Pinar” la encontramos junto al área recreativa del mismo nombre.
Con nuestro vehículo recorrimos Las Marismas de Bonanza que se encuentran alrededor del Pinar de la Algaida.

El Parque Dunar




El Parque Dunar y el Museo marino están situados en el margen más occidental de Matalascañas, junto a la piedra, emblema de la ciudad. Dentro de este formidable parque tenemos el Museo del Mundo Marino, que explora lo más desconocido del entorno Doñana, siendo los cetáceos sus principales protagonistas, de los que muestran 13 esqueletos reales. El Museo del Mundo del Parque Dunar hace un recorrido en sus cinco salas temáticas por los distintos ecosistemas y paisajes naturales que se pueden admirar en el entorno de Doñana, desde sus dunas móviles hasta las playas vírgenes donde recalan cada año los grandes cetáceos.

Este espacio natural ha sido habilitado para explicar el ecosistema dunar, paisaje de transición entre el mar y la tierra. Tanto las dunas fósiles como las móviles reflejan el dinamismo y permanente movimiento del entorno de Doñana, con su fauna y su flora propias.

En Matalascañas existe una empresa que ofrece rutas guiadas en dromedarios por el Parque Dunar. Durante Hora y media se realizará un interesante recorrido con dromedarios por el ecosistema más árido de Doñana.

Para más información:

Aires africanos

Información y reservas: 959448557
Animales Rompeolas SL.
e- mail: rompeolas_anim@terra.es
http://www.airesafricanos.com/

Oficinas y Centros de Visitantes


Oficinas del Espacio Natural Doñana
Centro administrativo El Acebuche

21760 Matalascañas-El Acebuche-Almonte (Huelva)
Tfnos.: 959.43.96.26 / 959.43.96.27
Fax: 959.43.96.48
E-mail: en.donana.cma@juntadeandalucia.es

C/ Sevilla n.º 33 - 1.ª planta
21730 Almonte (Huelva)
Tfno.: 959.43.95.67
Fax: 959.43.96.86

Centro de Visitantes "El Acebuche"
Ctra. de El Rocío a Matalascañas, Km 12
21760 Matalascañas, Almonte (Huelva)
Tfno.: 959.43.96.29
Horario: 8:00-21:00 (verano) y 8:00-19:00 horas (invierno)

Centro de Visitantes "La Rocina"
Ctra. de El Rocío a Matalascañas, Km 2
21750 El Rocío, Almonte (Huelva)
Tfno.: 959.43.95.69 / 959.43.95.70
Horario: 9:00-19:00

Centro de Visitantes "Palacio de El Acebrón"
Situado a 6 Km del centro de visitantes "La Rocina"
21750 El Rocío, Almonte (Huelva)
Tfno.: 959.50.61.62
Horario: 9:00-19:00

Centro de Visitantes "Los Centenales"
Parque Los Centenales
21740 Hinojos (Huelva)
Tfno.: 959.43.96.20
Horario: 10:00-15:00 y 16:00-20:00

Centro de Visitantes "Jose Antonio Valverde"
Cerrado Garrido. Marismas de Aznalcázar
41849 Aznalcázar (Sevilla)
Tfno.: 671.56.41.45
Horario: 10:00-20:00 (verano) y 10:00-18:00 horas (invierno)

Centro de Visitantes "Fábrica de Hielo"
Avda. Bajo de Guía, s/n
11540 Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)
Tfno.: 956.38.65.77
Horario: 9:00-14:00 y 16:00-21:00 (verano) y 9:00-14:00 y 16:00-19:00 (invierno)

Centro de Visitantes "Bajo de Guía"
Avda. Bajo de Guía, s/n
11540 Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)
Tfno.: 956.38.09.22
Horario: 10:00-14:00 y 18:00-20:00 (verano) y 10:00-14:00 (invierno)

Visitas guiadas en 4x4 por el Parque de Doñana

Doñana Reservas.
Av/Canaliegas
21750 El Rocío -Huelva-
TELÉFONOS: 959 44 24 74 o 629 06 05 45
FAX: 959 44 38 02
info@donanareservas.com

Doñana Nature
Salida de excursiones:
Desde el Rocío.
C/ Las Carretas nº 10
Desde Hinojos.
Los Centenales s/n
21740 Hinojos (Huelva)
Tlf. Y fax: 959442160 y 630978216

Rutas desde el Centro de Visitantes El Acebuche.

Centro de Visitantes "El Acebuche"
Ctra. de El Rocío a Matalascañas, Km 12
21760 Matalascañas, Almonte (Huelva)
Tfno.: 959.43.96.29
Reservas: 959430432
http://www.visitdonana.es/Customer/Availability/SightseeingProductDetails.aspx?ProductId=520723&lang=es-es&Prev=1&SiteId=10


El final de este viaje ha llegado. Solo queda esperar a que nuevos vientos nos traigan otra vez a este rincón de Andalucía. Somo privilegiados en tener la oprtunidad de disfrutar uno de los paraisos más extraordinarios de nuestro planeta.

Este artículo es solo un resumen. Para más información: granembolao@gmail.com

No hay comentarios: